Un nuevo lugar abrió entre la apretada oferta gastronómica de Polanco, un lugar donde el cabrito es el rey y las tortillas de harina opacan a las de maíz. La Buena Barra es la extensión en la ciudad de México de un restaurante que comenzó en Monterrey, donde “barra” es sinónimo de pretexto y no hace falta nada más para reunirse a convivir y poner la carne al asador.

Con apenas tres meses, la primera sucursal de La Buena Barra ya se ha ganado el corazón de los capitalinos, por supuesto, a través del estómago. Tanto así que no hay modo de conseguir una mesa sin reservar al menos tres días antes.

Su cocina está dedicada al sazón del noreste aquí y allá. Además del cabrito, otras estrellas de la carta son el chicharrón prensado y el lechón asado, que traen de ranchos en Coahuila donde se alimentan únicamente de orégano. Para los amantes de la res también es un paraíso; no se pueden perder el Rib-eye a la Himalaya, servido sobre un bloque de sal.

Si la carne no es lo tuyo, no te preocupes, su menú se esmera igualmente en los mariscos (taquitos de calamar) que en las entradas (queso a la plancha, tabla de verduras asadas) y en los acompañamientos (“frijoles con veneno”).

Una auténtica delicia son las tortillas de harina, amasadas y cocidas por una persona dedicada exclusivamente a este arte, oriunda de Nuevo León y venida con ese solo propósito. Visitar La Buena Barra bien vale la pena nada más para comer una de estas tortillitas enrollada con una pizca de sal.

Aristóteles 12, esq. Presidente Masaryk, Polanco
t. 5280 6699
L a S de 13 a 01:30 h
D de 13 a 19 h
Se recomienda reservar
Costo aproximado: $600 por persona
www.labuenabarra.com.mx

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[7 de febrero de 2014]