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Semiconductor, Halo, 2018. Tomada de WatchWorld.

¿La moda es arte?: La delgada línea entre moda y arte

Columna invitada 11.02.2020

María José Guzmán

Desde iniciativas que impulsan el arte hasta proyectos que pueden verse como gestos artísticos, este texto recoge la relación del arte y la moda.

A través de los siglos, se ha demostrado que la moda es parte fundamental de la historia. Cuando la indumentaria dejó de ser meramente un objeto funcional que cubría una necesidad básica de los seres humanos, la moda cobró un valor cultural y se convirtió en una de las formas de comunicación más importantes. La confección de las prendas y los materiales de los que estaban hechos, marcaban clases sociales y jerarquías.

El concepto del lujo en la creación de vestidos, joyas y accesorios nació y los autores de estas piezas se convirtieron, no solo en diseñadores, sino es artistas que expresaban un mensaje a través de la moda. María Antonieta, reina de Francia a finales del siglo XVIII, fue una de las primeras mujeres que llevaron la moda a otro nivel: creó su propio estilo. Se rodeó de gente como la diseñadora Marie-Jeanne Rose Bertin, quien le ayudó a crear una imagen cargada de opulencia y vanguardia; sus vestidos, plasmados en retratos de la época, son un referente, no solo para la moda, sino para la historia universal. Incluso se podría decir que esta imagen que María Antonieta creó para sí misma, fue la que la llevó a la guillotina, por sus excesos y el marcado contraste que había con el pueblo francés que moría de hambre.

Recientemente, en enero de 2020, concluyó en el Centre des Monuments Nationaux de París, la exposición Marie-Antoinette, Métamorphoses de’une image. En ella, se mostró vestimenta, joyas y zapatos de la reina, tanto como muestra de su vida, como del legado que tuvo para la moda. Estos objetos cobraron un valor artístico y fueron dignos de engalanar las vitrinas de un importante centro de arte parisino. Un ejemplo de que la moda y el arte, así, van de la mano.

Moda es arte. María Antonieta.

Vista de la exposición Marie-Antoinette, Métamorphoses de’une image en el Centre des Monuments Nationaux de París. Fotografía de Martin Bureau, AFP. Tomada de Head Topics.

Moda en los museos

Tal vez una de las exposiciones más esperadas cada año es la del Met Costume Institute del Metropolitan Museum of Art  en Nueva York. Desde 1948 la «Gala del Met» se creó para juntar fondos en apoyo a este importante instituto. Con los años, este evento se ha convertido en uno de los más importantes en la industria de la moda y del arte. Desde que la editora de Vogue, Diana Vreeland, se convirtiera en consultora del instituto en 1972, un tema específico se le asignó a la gala, uno que estableciera un diálogo profundo entre moda, artistas y espectadores, dando pie a la exhibición que hasta hoy en día ocurre cada mayo. Anna Wintour, actual editora en jefe de la revista, ha continuado con la labor de Vreeland, y bajo su mandato han ocurrido importantes exhibiciones como Moda e Historia: Un Diálogo (1992-1993), Cubismo y moda (1998-1999), La casa Chanel (2005), Alexander McQueen: Savage Beauty (2011), Schiapparelli y Prada, Conversaciones imposibles (2012), Camp: Notas sobre moda (2019) y la que vendrá en mayo de 2020, About Time: Moda y duración.

Moda es arte. Gala del MET

Gala del MET 2019. Fotografía de Johnny Dufort. Cortesía de Schiaparelli.

Otros recintos que son escaparate vital para la moda vista como legado artístico son el Museo de Artes Decorativas de París, el cual albergará la exhibición First in Fashion, a partir del 28 de febrero. En ella, se hará un recorrido sobre la historia de la revista Harper’s Bazaar a través de su fotografía (Richard Avedon, Man-Ray, por ejemplo), las modelos (Dovima, Twiggy, Lauren Bacall, hasta nuestros días), los diseñadores y todas las aportaciones, no solo en moda, sino culturales, artísticas, políticas y sociales que ha tenido la publicación en sus más de 150 años de existencia.

Por su parte, otros recintos como el Victoria and Albert Museum de Londres, actualmente presentan exposiciones sobre Mary Quant (la diseñadora que inventó la minifalda y fue pieza clave para el movimiento de liberación femenina en los 60) y otra sobre Tim Walker, el aclamado fotógrafo cuyas célebres imágenes para revistas de moda cautivan por su discurso onírico (cómo olvidar las fotos que realizó para W Magazine, con la actriz Tilda Swinton luciendo Alta Costura, en el incomparable escenario de Las Pozas de Sir Edward James, en Xilitla, haciendo homenaje a las artistas Remedios Varos y Leonora Carrington).

En México, varios museos han apostado para mostrar al público manifestaciones de moda que son un gran legado cultural y artístico: el Museo Jumex, con la exposición Naty Abascal ¡Y la moda! y el Museo de Arte de Zapopan con Redefinir la forma. Objetos para el Cuerpo, sobre la visión de la diseñadora Rei Kawakubo y su icónica firma Commes des Garçons.

Así, la moda tiene en los museos a su mejor aliado para mostrarle al mundo su lado artístico y entenderla como una de las formas más bellas e importantes de comunicación.

Arte es moda. Rei Rei Kawakubo

Vista de la exposición Redefinir la forma. Objetos para el Cuerpo en el Museo de Arte de Zapopan. Cortesía del museo.

Moda como impulsor del arte

En 1993 se creó la Fondazione Prada, con el objetivo de impulsar el arte a través del apoyo y la exhibición de artistas emergentes a nivel mundial, así como de la exposición de la Colección Prada, con obras de los siglos XX y XXI. Invitan a diversos curadores, artistas, arquitectos, científicos, estudiantes, periodistas y pensadores, a generar nuevas ideas y a mostrarlas al mundo. En 2015, la fundación abrió su recinto al sur de Milán, con un impresionante complejo arquitectónico de 19 000 m2, obra del aclamado Rem Koolhas, y actualmente cuenta con exhibiciones permanentes de artistas como Carsten Höller, cuyo proyecto titulado Synchro System es uno de los más visitados y aplaudidos de la Fondazione.

Cabe señalar que dentro del impresionante espacio arquitectónico, se ubica un lugar especial en donde se realizan todas las pasarelas de la marca. Cada temporada Miuccia Prada y su equipo presentan en la Fondazione sus colecciones. De esta forma, el recinto funge también como escenario principal de las propuestas de moda que genera la firma italiana cada seis meses.

Firmas como Louis Vuitton y Audemars Piguet también apuestan por el apoyo a proyectos de arte. La Fondation Louis Vuitton tiene los mismos valores que los de Prada, impulsar proyectos artísticos y culturales (y una impresionante sede en París, creada por el aclamado Frank Gehry); mientras que la firma relojera AP, siempre recurre a artistas plásticos, como el chileno Sebastian Errazuriz, para promover sus exposiciones en escenarios como el Salón Internacional de Alta Relojería en Ginebra y Art Basel en Basilea, Miami y Hong Kong.

Ya sea por realzar su imagen, por crear nuevas opciones de negocio, o por una genuina labor de promoción de las diversas expresiones artísticas, las marcas de firma de lujo le están dando un espacio y un micrófono al arte. Algo que siempre se agradece.

Semiconductor, Halo, 2018. Cortesía de Audemars Piguet. En la imagen, los artistas Ruth Jarman y Joe Gerhardt.

¿Es la moda, arte?

Después de hacer este recorrido sobre el estrecho vínculo entre ambos, esta interrogante es necesaria. ¿La moda es arte? Para contestar, el siguiente video resulta imprescindible:

Los momentos más icónicos de las pasarelas del ya fallecido diseñador británico Alexander McQueen. No se trata de indumentaria que cubre una necesidad básica en las personas. Su obra (porque eso es exactamente, una obra) trasciende en varios sentidos: como una oda a la confección y a la innovación en el uso de materiales no convencionales; como una crítica social ante diversas problemáticas del mundo: consumismo, enajenación, destrucción de la naturaleza; como una puesta en escena que conjuga artes plásticas, visuales, música, danza, teatro, actuación, diseño y arquitectura; y, por último, como un lienzo en blanco, tal como se ve en un su pasarela de primavera 1999, en donde unos robots lanzan pintura sobre un voluminoso vestido blanco portado por la supermodelo Shalom Harlow, y crean in situ, al momento del desfile, el diseño del vestido. Esto es un performance artístico y quienes lo presenciaron en vivo, tuvieron el honor de estar en uno de los momentos más importantes y fascinantes de la historia de la moda.

Obviamente creadores como Coco Chanel, Yves Saint Laurent, Christian Dior, Cristóbal Balenciaga, y Karl Lagerfeld, rompieron esquemas con sus diseños. Sus prendas no solamente son dignas de estar en cualquier museo del mundo, sino que escribieron historia, rompieron paradigmas, revolucionaron maneras de verse y de pensar, abrieron brecha hacia lo que hoy conocemos como moda. Su obra inspira, te hace reflexionar, te invita a cuestionarte, te genera sentimientos. Al ver los performances de Alexander McQueen, la piel se pone de gallina, los ojos se humedecen y el corazón se agranda. Y eso es precisamente lo que genera el arte.

María José Guzmán

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Vista de la exposición Marie-Antoinette, Métamorphoses de’une image en el Centre des Monuments Nationaux de París. Fotografía de Martin Bureau, AFP. Tomada de Head Topics.

Gala del MET 2019. Fotografía de Johnny Dufort. Cortesía de Schiaparelli.

Vista de la exposición Redefinir la forma. Objetos para el Cuerpo en el Museo de Arte de Zapopan. Cortesía del museo.