Cn

Lo mejor de la década: Moda. De la era de Instagram a los costos ambientales

Especial 12.12.2019

María José Guzmán Medina

Tendencias, creadores, cambios en la forma de comprar: esta década representó cambios decisivos para la disciplina de la moda.

Entre 2010 y 2019 hubo varios personajes, acontecimientos y movimientos que han marcado un rumbo diferente en el ámbito de la moda. Permítanme enlistar los que, en mi opinión, fueron los más relevantes:

 

—Moda en la era Instagram

Con el auge de las redes sociales, especialmente Instagram, la moda sufrió una revolución. El surgimiento de las fashion bloggers e influencers cambió paradigmas. Se volvieron las estrellas, presentes en las primeras filas de los desfiles de moda, protagonistas de campañas publicitarias de las marcas, personajes de portada en las principales revistas de moda en el mundo, y hasta diseñadores de sus propias firmas. Personas como Chiara Ferragni se convirtieron en role models, en la aspiración de millones y en minas de oro para realizar colaboraciones.

Diseñadores emergentes, por su parte, tienen en las redes sociales una plataforma para darse a conocer y para vender sus creaciones. Muchos diseñadores mexicanos amigos, me han comentado que logran más ventas a través de sus cuentas de Instagram que en sus tiendas físicas. En definitiva, dentro de los beneficios que ha traído este medio uno de los más importantes es el acercamiento inmediato entre el diseñador/marca con audiencias de todo el mundo.

Foto tomada de Motion Array.

—Moda en México

En definitiva hubo grandes avances. Creadores consagrados como Julia y Renata, reafirmaron que son grandes. Pero muchos otros surgieron y han dado paso a una oleada de talentos nacionales dignas de tener en el radar: Alfredo Martínez, Abel López, Lorena Saravia, Francisco Cancino, Iván Ávalos, Vero Díaz, Juan Luis Valadez, Ángela Reyna, por mencionar algunos. Nuestro papel como comunicadores es difundir su trabajo, darlo a conocer para que las audiencias sepan quienes son y reconozcan el valor de su trabajo y los consuman. Solo así podremos aportar para fortalecernos y crear una verdadera industria de la moda en nuestro país.

Lorena Saravia, Otoño-invierno 2015-16.

—Fast-fashion

Marcas como Zara (Grupo Inditex), H&M, Mango, Forever 21, entre otras, alcanzaron la gloria durante esta década. No sólo por su expansión física, sino porque se unieron al ecommerce. Sus apps móviles son tan fáciles de usar que puedes comprar en cuestión de minutos (y tener entregado tu pedido en casa en dos o tres días). Mientras una pasarela está sucediendo, es probable que la tendencia presentada en dicha pasarela pueda ser vista en los anaqueles de Zara en cuestión de pocas semanas. Aquí entramos al escabroso tema de las copias, los derechos de autor, el dilema de la democratización de la moda y, lo más devastador: el costo a los derechos humanos, laborales y hacia el planeta. 

Lo mejor de la década. Fast Fashion.

Pila de tela en un basurero cerca de Damasco, Siria. Tomada de The Designers Studio.

—La moda invade las calles

Con la ayuda de las redes sociales, el streetstyle se convirtió en el mejor escaparate de estilo de la década. Las personas hicieron de la calle su pasarela. Fotógrafos como The Sartorialist, Tommy Ton, Yvan Rodic y, por supuesto, el ya fallecido Bill Cunningham, retrataron a las personas con más estilo del mundo, ya sea a las afueras de un desfile durante la semana de la moda en Nueva York, Tokio, París, Londres o Milán, o simplemente en su día a día en las calles de su ciudad. El resultado es más que simples galerías con las prendas del momento: son testimonios fotográficos que reflejan a la sociedad, la cultura y la moda hoy.

5 personas en pasarela de moda. Virgil Abloh

Kanye West (al centro), Don C, Taz Arnold, Chris Julian, Fonzworth Bentley y Virgil Abloh (extremo derecho). Fotografía de Tommy Ton. Tomada de Pinterest.

—Moda y sustentabilidad

Uno de los temas que se puso sobre la mesa con el crecimiento del fast-fashion es la sustentabilidad. Las marcas cada vez optan por enfoques eco-friendly, en donde su mano de obra sea tratada y remunerada justamente, y en donde sus procesos sean lo más amigables con el planeta. Las personas cada vez optan más por consumir productos de marcas que se preocupen por el medio ambiente y por las condiciones laborales justas de quienes los están creando. El desarrollo sostenible es uno de los temas que seguirá dando mucho de qué hablar durante los próximos años y en donde las marcas, sobre todo las de fast-fashion, tendrán que cambiar sus estrategias si quieren seguir subsistiendo.

Greenpeace, Activistas manifestándose contra Levi’s en Aguascalientes, 2012. Tomada del sitio web de Greenpeace.

—El nuevo lujo

En los último diez años, la definición del lujo sufrió cambios drásticos. Si bien una bolsa Chanel 2.55 sigue siendo uno de los mayores objetos de deseo, también lo son un par de tenis Nike de edición limitada en colaboración con Virgil Abloh, director creativo de la marca de streetwear Off-White (y de menswear de Louis Vuitton). Y su precio también lo confirma. Artículos del llamado athleisure (ropa de aire deportivo pero usada en el día a día) se han convertido en las prendas más codiciadas. Ediciones limitadas de marcas como Yeezy (creada por Kanye West) se cotizan alto, y aunque en realidad se trate de prendas desgarradas o sneakers deportivos, el branding y el culto que hay alrededor de los personajes que las crean, las convierte en objetos de lujo.

Colección Louis Vouitton primavera-verano 2019 por Virgil Abloh en la Fashion Week de París. Tomada de http://velvet-mag.lat/

—Grandes diseñadores que se fueron y lo que nos dejaron

Karl Lagerfeld (Chanel, Fendi y su marca propia), Alexander McQueen y Azzedine Alaïa, fueron tres genios de la creatividad, la confección, los sueños, las telas, la deconstrucción… Estos diseñadores murieron durante la última década. Pero su legado vivirá para siempre. Rompieron reglas, levantaron emporios, protestaron a través de sus diseños, crearon discursos nuevos, importantes y necesarios para darle a la moda la importancia cultural y sociológica que merece. Su trabajo no es trivial. Vivirá para siempre y seguirá inspirando a las nuevas generaciones de diseñadores.

Karl Lagerfeld en desfile de Chanel. Tomada de Todo Noticias.

María José Guzmán Medina

Estudió Ciencias de la Comunicación en el Tecnológico de Monterrey, Campus Ciudad de México. Tiene una maestría en Comunicación de Moda y Belleza de la Universidad Carlos III de Madrid- Vogue. Fue coordinadora y editora de moda de la revista InStyle México. Ha impartido clases de Editorialismo y Estilismo de Moda, en la Universidad Iberoamericana, así como diplomados de Moda y Medios, en el Tec de Monterrery, Campus León. Actualmente es coordinadora editorial de la revista Harper’s Bazaar México.

siguiente

Newsletter

Mantente al día con lo último de Gallery Weekend CDMX.

Pila de tela en un basurero cerca de Damasco, Siria. Tomada de The Designers Studio.