El Crematorium Siesegem, uno de los diseños más recientes de KAAN Architecten, fue realizado con la firme convicción de resaltar el ambiente natural de las afueras Aalst, una ciudad localizada en Bélgica —caracterizada por una vegetación escasa y un paisaje casi desértico.

KAAN Architecten, Crematorium Siesegem, 2018. Fotografía de Sebastian Van Damme. Cortesía de KAAN Architecten.

El propósito de ofrecer un nuevo crematorio a la comunidad de Aalst provino de la tradición y cultura que envuelve a estos lugares. De acuerdo con palabras de KAAN Architecten: «En Bélgica, los crematorios tienen un programa más complejo que en otros países. Son espacios para la reunión, disfrutar de una comida y reconectarse con parientes y amigos. La experiencia significativa del cliente y el diálogo fueron cruciales para el proyecto». Bajo esta premisa, la firma se propuso el diseño de un «espacio legible», en el que la orientación del usuario requiriera en lo mínimo la presencia de señalética y las emociones asociadas con la tranquilidad fueran la prioridad, lejos del esquema de los crematorios, que se caracterizan por espacios complejos, dada la naturaleza de las logísticas de este proceso.

KAAN Architecten, Crematorium Siesegem, 2018. Fotografía de Sebastian Van Damme. Cortesía de KAAN Architecten.

Con esto, el Crematorium Siesegem propone una estancia más tranquila durante el periodo de duelo para los asistentes. Su arquitectura acompaña a sus usuarios de un ajetreado mundo exterior a un interior metafísico, inmerso en la calma. En este planteamiento, la altura del inmueble juega un papel importante: con 6.4 metros y amplias ventanas, la presencia de la luz natural produce un ambiente cálido que refuerza el sentimiento de paz buscado por KAAN Architecten.

KAAN Architecten, Crematorium Siesegem, 2018. Fotografía de Simone Bossi. Cortesía de KAAN Architecten.

El Crematorium Siesegem conjunta dos salas ceremoniales, cuyo diseño de interior atiende a tonos beige y amarillos; matices recurrentes en los crematorios belgas, empleados —en este caso— como una referencia a la arena y el polvo de la zona. Ambos espacios contienen un salón familiar y lugar para condolencias y un área abierta con senderos verdes, como contrapeso simbólico al ambiente relacionado con el fallecimiento de un ser querido.  

KAAN Architecten, Crematorium Siesegem, 2018. Fotografía de Simone Bossi. Cortesía de KAAN Architecten.

Sin condescender con la tendencia monumentalista, el Crematorium Siesegem y su diseño de paisaje envolvente —a cargo de Erik Dhont— procura hacer sentir al usuario dentro de un oasis pacífico, en el que la memoria puede converger sin el dolor producido por una pérdida personal.