La incorporación de elementos naturales en la construcción de edificios no es algo completamente nuevo, pero sin duda es un asunto que se perdió durante la modernidad, donde los materiales industrializados dieron forma no solo a las edificaciones, sino a toda una filosofía de trabajo y cómo se determina la habitabilidad de un espacio.

En los últimos 30 años, las preocupaciones por el cambio climático han hecho más necesarios procesos de construcción amigables con el medio ambiente, que a su vez puedan brindar una solución a años de planeación urbana orientada al concreto y a un paisaje predominantemente gris.

A continuación, presentamos algunos proyectos arquitectónicos que han sido desarrollados teniendo en cuenta a la naturaleza.

—Nanjing Zendai Himalayas Center, por MAD (2020)

MAD, Nanjing Zendai Himalayas Center. Tomada de la web del despacho.

El crecimiento urbano de China en las últimas cuatro décadas se ha convertido en todo un caso de estudio. Este país cuenta con 6 de las megaciudades más pobladas a nivel mundial, algo que la coloca como un territorio donde se estarán desarrollando algunas de las propuestas arquitectónicas y urbanísticas más innovadoras. 

Para muestra de ello, se puede mencionar el Nanjing Zendai Himalayas Center, en China, un proyecto que ocupa 560 mil metros cuadrados y está ubicado en la ciudad de Nanjing, reconocida por su amplio legado histórico.

En este desarrollo urbano destacan las formas curvas de sus rascacielos, por tener varias zonas verdes y, sobre todo, por los cuerpos de agua (estanques, piscinas, cascadas y arroyos) que conectan a todos los edificios.

El proyecto fue planteado por MAD, un despacho con base en China y Tokio fundado por Ma Yansong. MAD se ha basado su práctica arquitectónica en valores como la coexistencia con la naturaleza y la atemporalidad.

—Torre Rosewood, por Ateliers Jean Nouvel (2020)

Ateliers Jean Nouvel, Torre Rosewood. Tomada de Pinterest.

Durante siglos, se pensó en la arquitectura como una especie de antítesis de la naturaleza, cuyo resultado, lejos de buscar una integración con el entorno, debía destacar en muchos aspectos.

El nuevo proyecto del reconocido arquitecto Jean Nouvel intenta revertir este precepto. Ubicado frente al Parque Municipal Matarazzo (São Paulo, Brasil), el hotel de la familia Rosewood fue concebido para integrarse de manera efectiva con el entorno natural que le rodea. Nouvel vio en el Parque Matarazzo y en su flora —que se disemina incluso por toda la Avenida Paulista— un espacio de árboles asombrosos, como los ficus y las talaumas.

El hotel de lujo incluirá 151 habitaciones, 122 unidades residenciales, dos restaurantes, un bar y un caviar lounge. Cada terraza contará con distintas especies de árboles locales.

La inuguración de este proyecto está proyectada para el segundo semestre del 2020.

—Bosco Verticale, de Boeri Studio, Italia (2014)

Boeri Studio, Bosco Verticale, 2014. Tomada de ArchDaily.

Ubicado en el Centro Direzionale di Milano, este complejo residencial se considera el primer esfuerzo con perspectivas ecológicas para revertir la expansión urbana. En síntesis, el proyecto consta de dos torres de 80 y 112 metros, que albergan 480 árboles grandes y medianas, 300 árboles pequeños, 11 000 plantas perennes y 5 000 arbustos.

El «Bosque vertical» es un método de lucha contra la expansión que ayuda a controlar y reducir la expansión urbana. En términos de densidad urbana, cada torre constituye el equivalente de una zona periférica de casas y edificios de alrededor de 50 000 metros cuadrados.

La diversidad de plantas en cada uno de sus pisos crea un regulador de temperatura natural, que produce humedad, absorbe CO2 y partículas, genera oxígeno, y protege a los habitantes de la contaminación y el ruido.

—PARKROYAL on Pickering, de WOHA Architects, Singapur (2009-2013)

WOHA Architects, PARKROYAL on Pickering, 2009-2013. Tomada de ArchDaily.

El PARKROYAL on Pickering es un ejemplo de que los entornos naturales son elementos que agregan una nueva dimensión al concepto de «habitar» en las grandes ciudades.

Ubicado en Singapur —un país que está realizando grandes esfuerzos en materia de arquitectura sustentable—, el PARKROYAL on Pickering es un hotel que incorpora una estructura arquitectónica contemporánea de acero y vidrio, pero con suficiente espacio para una serie de pisos con distintos tipos de vegetación, con el propósito de funcionar como un oasis en medio del frenesí urbano, capaz de brindarle una atmósfera de tranquilidad a sus huéspedes.

El proyecto fue desarrollado por WOHA, una firma de arquitectos radicados en Singapur, quienes ya cuentan con un portafolio considerable de construcciones en las que pueden coexistir la naturaleza y las necesidades contemporáneas de habitabilidad.

—Edificio de la Fundación ACROS Fukuoka, de Emilio Ambasz, Japón (1990-1994)

Emilio Ambasz, Edificio de la Fundación ACROS Fukuoka, 1990-1994. Foto: Kenta Mabuchi. Tomada de Wikipedia.

Diseñado por el arquitecto argentino Emilio Ambasz, quien tiene una amplia trayectoria e interés en el desarrollo de propuestas sustentables, y considerado como uno de los primeros referentes contemporáneos de «edificios verdes» , este espacio de la Fundación ACROS Fukuoka brinda una opción urbana para el entorno portuario de la ciudad japonesa, donde la dinámica comercial de la zona dificulta la existencia de espacios de esparcimiento y tranquilidad.

Reminiscente a la forma de una montaña, el edificio cuenta con más de 10 terrazas verdes, que permiten una regulación de la temperatura de los interiores. Entre los espacios con los que cuenta esta recinto se puede mencionar un museo, un teatro para una audiencia de 2000 personas, salas de conferencias y una amplia extensión verde al nivel de la calle, delimitada por árboles.