Luces verdes desenfocadas y sonido ambiental. El movimiento color esmeralda adquiere la forma de una figura humana. Se escucha música atenuante y se muestra una danza grabada con una cámara de video casero. Acento británico. Contraste. Piel café. Un bote en la orilla del mar. Un grupo de inmigrantes. Una mujer sobresale con una manta térmica de tono amarillo-metálico. Se trata de tan solo un artificio pues se observa un equipo de producción. Parece ser un tipo de making-off / backstage del videoclip Borders dirigido e interpretado por M.I.A. Es la introducción de un documental que tardó casi una década en editarse.

22 años de registro. Una vida capturada en 700 horas de material amateur. Cámaras en mano y evolución de soportes audiovisuales. La fuente de grabación proviene de la mano del personaje principal. Pláticas personales dirigidas a la cámara. Entrevistas familiares y entrevistas mediáticas. Conciertos y guerras. Es como un confesionario a manera de videoblog. Archivo y montaje. Una entrevista con Spike Jonze en épocas de Myspace y un concierto en el Super Bowl al lado de Madonna.

Still de MATANGI / MAYA / M.I.A. Steve Loveridge, 2018.

Inicialmente, tiene apariencia de crónica con una estructura tradicional. Sin embargo, MATANGI / MAYA / M.I.A (2018) es un retrato audiovisual realizado por Steve Loveridge a manera de documental. En México se presenta por vez primera como parte de Ambulante, dentro de la sección Sonidero, después de haber estado en Sundance y la Berlinale. El material personal de la artista originaria de Sri Lanka se re-interpreta en un montaje dinámico-paralelo, en conjunto con música y pensamientos en voz alta tipo videodiario.

La estructura narrativa contrasta varias situaciones de la vida de Maya Arulpragasam, como el ser una estrella internacional de hip-hop y lo que implica que su padre sea el cofundador del Movimiento de Resistencia Tamil. De ahí emergen reflexiones sobre la migración y los refugiados, pensamientos y sentimientos sobre lo que es vivir en dos contextos sociales y culturales distintos. Maya tiene la necesidad de crear para intentar cambiar al mundo.

Música e imágenes desde un punto de vista honesto e íntimo. Con una estética en la línea de Jeremy Deller y un estilo similar al de Asif Kapadia, son tres nombres y tres facetas en una película de hora y media. Una mirada crítica-afectuosa que es consecuencia de una vieja amistad surgida en los noventa: el director y la cantante estudiaron juntos en Central St. Martins Art School. Lo que propone Loveridge es una reflexión, no sólo por la persona, música y videos de quien habla, sino porque trasluce cuestiones políticas y mediáticas alarmantes.

Muchas veces los documentales sobre músicos o bandas se dirigen únicamente a sus fans. Sin embargo, un enfoque creativo, crítico e incluso político puede ser motivo suficiente para atraer a un público más amplio. Quizá esa es una de las virtudes de MATANGI / MAYA / M.I.A: no se necesita conocer mucho sobre la cantante para encontrar interesante lo que se propone en pantalla. De esa manera, no es el típico documental que sigue a un artista durante conciertos o giras: aquí el proyecto va más allá de la música en sí.

Still de MATANGI / MAYA / M.I.A. Steve Loveridge, 2018. Tomada de YouTube.

«Paper Planes» suena por un breve momento. Con una interrupción, se indica que el documento pretende ir por otro camino.

El documental explora una historia de migración. En él, el tema central en ningún momento es la música. En este audiovisual, importa más mostrar la discriminación dentro del espectáculo y la poca información que existe sobre una guerra.

Maya es un referente en la cultura occidental, reconocida en la industria cinematográfica por su música en la cinta Slumdog Millionaire (2008) de Danny Boyle. Si bien sus álbumes exponen una identidad específica, como ocurre con muchos otros raperos, a la fecha ha sido atacada por sus intenciones ideológicas. Es así como su música involucra protestas simbólicas. Por ello, en la cinta de Steve Loveridge, importa más lo que ella piensa y hace, pues constantemente causan polémica los críticos videos que produce.

Still de MATANGI / MAYA / M.I.A. Steve Loveridge, 2018. Tomada de YouTube.

De alguna manera, la famosa inmigrante intenta borrar fronteras audiovisuales; es decir, llevar el mensaje musical al mensaje visual —y luego del videoclip al cine documental. Su perspectiva social proviene de problemas actuales y, en específico, de su familia. Historias sobre su abuela, su padre y el pueblo Tamil. Bombas y ruido. ¿Performance artístico o protesta? ¿«Terrorismo» o activismo? ¿Crítica social o publicidad? ¿Censura o espectáculo?

Pantalla negra. Manchas rojas con ritmo de balazos. Diseños coloridos y caos. «¿Por qué pusieron que mi profesión es periodista? […]Claramente les dije que hago cine experimental. […]No quiero que mi pasaporte diga que soy periodista porque a los periodistas los matan».

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Mariana Dianela Torres estudió Ciencias de la Comunicación con especialidad en Producción Audiovisual en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM. Se dedica a la investigación, experimentación y realización audiovisual. Su trabajo ha sido proyectado y exhibido en México, Sudamérica, EE.UU. y Europa.