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Renoir, de Gilles Bourdos: Entre la pintura y el cine

03.07.2013

Es la Segunda Guerra Mundial. Pierre-Auguste Renoir (Michel Bouquet), de 74 años, vive en una granja en el sur de Francia; su esposa acaba de morir, pintar le es muy doloroso a causa de sus enfermedades y dos de sus hijos han sufrido heridas graves durante la guerra. Pese a todo ello, el pintor se niega a usar el color negro en sus obras. «Una pintura debe ser algo placentero y alegre. Ya hay suficientes cosas desagradables en la vida. No necesito pintar más», declara.

Cuando su hijo Jean (Vincent Rottiers) vuelve a casa para recuperarse de una herida en la pierna, encuentra junto a su padre a Andrée «Dedée» Heuschling (Christa Théret), una joven de quince años que trabaja como modelo para él, recomendada por Matisse. Es ella, la última modelo de Renoir padre y la primera actriz de Renoir hijo, la que motivó al director Gilles Bourdos a realizar el filme. Dedée, que Bourdos describe como «volcánica» y poseedora de cierta insolencia o arrogancia, es el lazo entre la creación del padre y el hijo: «Filmé la película por ella. Ella fue la clave para adentrarme en el mundo de los Renoir. […] Incluso en Francia su historia es desconocida. Si vas al Museo de Orsay en París, puedes verla en todas las obras tardías de Renoir; está en la Cinemateca también. Pero no hay gran cosa escrita sobre ella. Una mujer que provee el puente entre la pintura y el cine —eso es fascinante para mí.»

En principio sin planes claros para el futuro, Jean Renoir da sus primeros pasos en el cine por el deseo de Dedée de convetirse en actriz. A diferencia de su padre, Jean no se negó a retratar la guerra; por el contrario, fue su testigo en filmes como La Grande Illusion (1937) y La Règle du Jeu. Pero una vez que la paz se restableció, sus motivos fueron más cercanos a la fantasía y la belleza que prefería Pierre-Auguste. El color intenso de estas cintas y la constante presencia del rojo en las últimas pinturas de Renoir llevó a Bourdos a prestar mucha atención al color durante la filmación. Además, trabajó sin storyboards para dar cabida al azar, al igual que lo hacía Jean en los años 30.

El filme formó parte de la selección Un certain regard en el Festival de Cannes. Mira el trailer en la galería de arriba.


[2 de julio de 2013]

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