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Activismo y feminismos: 3 organizaciones más allá del arte

Archivo Código 07.04.2020

En 2020 platicamos con las voceras de tres organizaciones colectivas que luchan contra las diferentes formas de violencia y desigualdad que viven las mujeres.

 

Ante los diferentes retos y problemáticas que derivan de la violencia, las desigualdades, la inequidad, etcétera, las mujeres se organizan colectivamente para gestionar y desarrollar estrategias que marquen la diferencia.

En este especial platicamos con voceras de las organizaciones colectivas Brujas del Mar, Normalización de la Lactancia y Restauradoras con Glitter para conocer sus objetivos y los retos que tienen en el contexto actual.

En el equipo editorial de Revista Código, queremos agradecer a nuestras interlocutoras, quienes se tomaron el tiempo de responder nuestras entrevistas desde la cuarentena.

 

Brujas del mar | Veracruz
Arussi Unda

Activismo y feminismos. Brujas del mar.

Foto: Cortesía.

—¿Cuéntenos sobre Brujas del Mar y sobre su participación en la iniciativa #UnDiaSinNosotras?

Brujas del mar somos mujeres que tenemos muchas ganas de que las cosas cambien. La agrupación existe más o menos desde hace un año. En realidad teníamos otro nombre, pero nos robaron el nombre, el grupo y todo; así que tuvimos que reiniciar todo el 22 de agosto de 2020 ya con el nombre de Brujas del Mar.

En la colectiva participamos 20 mujeres de formaciones muy diversas: tenemos una fotógrafa, tres diseñadoras, una mercadóloga, una psicóloga, una enfermera, una maestra de artes marciales, madres solteras, make-up artists

Por medio de un grupo cerrado de Facebook, pretendíamos hacer una comunidad feminista en Veracruz, para intercambiar información y para ayudarnos entre nosotras. Y fue así como empezó todo: a ese grupo de Facebook empezaron a llegar casos de violencia, así que decidimos llevarlo a las redes sociales abiertas.

Sobre nuestra participación en el paro nacional de mujeres, creo que fuimos convocantes involuntarias, porque no teníamos idea del impacto que iba a generar todo esto. Por lo general las movilizaciones feministas quedan dentro de la comunidad feminista, por lo que romper esta barrera y que la iniciativa haya llegado a personas que no simpatizan con los ideales feministas, fue impresionante.

Nadie esperaba esto, pero creo que es un reflejo del hartazgo y miedo que hay sobre el tema de violencia contra las mujeres en México. Sin embargo, ésta fue una iniciativa que Vanessa Bauche lanzó el 21 de enero en un grupo de WhatsApp, que se estuvo rebotando y que llegó a nuestro grupo a principios de febrero. De ahí decidimos usar el eslogan: «El nueve ninguna se mueve», el hashtag #UndiaSinNosotras, hicimos la imagen y la pusimos en redes; lo demás es historia.

—¿Cuáles son sus objetivos?

Esa es una pregunta que nos hacen mucho; y la respuesta cambia a cada rato.

Como en Brujas del Mar todo se ha dado de una forma muy orgánica, nosotras no nos hemos puesto una meta única, porque tanto acompañamos a víctimas de violencia como conseguimos ayuda psicológica, hacemos recorridos para proporcionar alimentos a personas sin techo, visitamos asilos de ancianas. Gracias a nuestras redes colaborativas, hacemos de todo.

Pero yo diría que nuestra meta es la liberación de la mujer de las violencias patriarcales.

A raíz del 9M empezamos a dedicarnos a los temas de políticas públicas. Obviamente nos sentamos con especialistas en la materia, ya que en la organización no hay expertas. Y en breve desde nuestros canales daremos a conocer nuestro pliego petitorio.

—¿Cuáles son sus planes a mediano plazo?

Con el apoyo de varias psicólogas, lanzamos hace unos días el proyecto «Red de contención emocional»: una línea telefónica de ayuda para mujeres en crisis. También hemos tratado de armar —eso sí que nos ha estado costando un poco de trabajo— una de línea gratuita de atención jurídica para mujeres. Trabajamos con el tema de los refugios, pero eso se nos está complicando, porque no hay, por lo que nos hemos puesto muy creativas. Creo que la falta de recursos tanto en leyes como en instituciones, o la falta del apoyo de autoridades, hace que te vuelvas creativa.

—¿Qué papel consideran que desempeña Brujas del mar en la lucha feminista en este momento?

De manera involuntaria nos han dado un papel muy importante, así que tenemos una responsabilidad muy grande. Existen muchas mujeres en México que llevan diez, veinte o incluso 30 años luchando por ser escuchadas y de pronto, casi por un golpe de suerte, nos ponen el micrófono a nosotras.

De entrada, quisiéramos usar esta exposición para visibilizar la lucha de tantas mujeres en las periferias, porque nosotras somos de la periferia.

Yo creo que hay que mostrar esta lucha, tejer redes con más mujeres, seguir trabajando en temas de violencia de género, seguir abriendo espacios a otras mujeres para que alcen la voz y puedan exponer sus proyectos y trabajos. La verdad es que, como diría Vanessa Bauche, «ser activista es el peor trabajo del mundo, porque requiere muchísimo esfuerzo, no es pagado y es de alto riesgo».

Este es un momento para voltear a ver a todas las mujeres que están trabajando en este tipo de iniciativas.

Para estar en contacto con Brujas del mar, visita TW: @brujasdelmar |  IG: @brujasdelmarver | FB: Las brujas del mar

 

 

—Normalizando la Lactancia Materna, México | Ciudad de México
Chantal Escartin

Activismo y feminismos. Normalizando la Lactancia Materna.

Foto: Cortesía.

—Cuéntanos sobre Normalizando la lactancia.

Varias mujeres que somos lactantes y que apoyamos la lactancia materna —es decir somo «lactivistas»— nos unimos ante una problemática: necesitábamos más información sobre la lactancia materna, porque nunca te enseñan sobre ese tema, no te lo enseñan en la escuela y ni siquiera los pediatras saben mucho sobre el tema —es realmente terrible la situación de la lactancia en México.

Nos unimos para abogar por la lactancia materna, pero de una manera social, porque ya existen varios grupos que apoyan la lactancia materna desde un punto de vista más médico. Nos parece que el tema social es muy importante porque aún existen muchos prejuicios, hasta el punto en el que en varios museos no se permite que mujeres amamanten —aunque también pasa en otros lugares.

El tema de la lactancia es importante porque, precisamente, se le han dado connotaciones de moral y pudor; parecería que no tenemos propiedad sobre nuestros cuerpos.

Iniciamos con un chat donde varias mujeres nos asesorábamos sobre la lactancia. Cuando estás amamantando, sobre todo cuando inicias, te sientes muy vulnerable.

Creemos que esta incomodidad se debe a que la sociedad nos está fallando y les está fallando a nuestros bebés: por eso empezamos a hacer fotografías para visibilizar y normalizar la lactancia. La realidad es que las mujeres salimos a la calle, y no hay nadie más amamantando, y eso hace que sea algo penoso. Además, sacarte el pecho en público es difícil porque es una parte de nuestros cuerpos que se ha sobresexualizado.

De este primer chat, algunas mujeres abrimos otro grupo donde nos empezamos a organizar y a definir nuestros objetivos. En ese contexto a una mujer compartió lo que le sucedió en el Museo de Arte Moderno, donde se le prohibió amamantar a su bebé.

El colectivo lo conformamos 40 personas de todos los perfiles posibles: algunas son asesoras de lactancia o educadoras perinatales, tenemos a alguien que ve la parte de legal, porque justamente no existe una ley que te diga que no puedes amamantar en público; y además estamos aliadas con muchas otras mujeres que están a favor de la lactancia en el espacio público.

—¿Cuáles son sus objetivos?

Trabajamos bajo tres pilares: visibilizar, promover y proteger, y en cada uno de ellos tenemos diferentes actividades.

Ahorita estamos trabajando muy de la mano con los museos para hacer sensibilizaciones, tetadas y, probablemente, hagamos una exposición. El pasado 7 de marzo hicimos una tetada en e Museo de San Carlos y fue lo último que pudimos hacer debido a la contingencia por el coronavirus. La tetada del Museo de San Carlos estuvo muy bonita porque invitamos a mujeres que amamantan, y después se hizo una plática en torno a pinturas del museo, en algunas de esas obras hay mujeres amamantando.

Por otro lado, trabajamos en la realización de talleres de sensibilización para diferentes espacios; empezamos por los museos, pero también queremos llegar a instituciones de gobierno y empresas.

—¿Cuáles son sus planes a mediano plazo?

El proyecto más grande que tenemos este año es una petición para que se incluyan preguntas sobre lactancia en el examen de medicina general, porque lo que sucede es que ni los médicos ni enfermeras ni nutriólogas están actualizados sobre temas de la lactancia.

—¿Qué papel consideran que desempeña Normalizando la lactancia en la lucha feminista?

Nosotras llevamos el tema del feminismo más al tema de la maternidad. A nivel personal, ser madre me hizo consciente de la violencia obstétrica y su extensión hasta la lactancia. Toda la experiencia médica en torno a la maternidad es muy misógina. Se minimizan los derechos de las mujeres: embarazarse parece una enfermedad y se trata así.

La lactancia puede prevenir muchas enfermedades y no hay un interés al respecto. La violencia obstétrica se da a todos los niveles socioeconómicos, en todos los hospitales. Es una violencia normalizada contra la mujer, y se da en un momento muy vulnerable de nuestras vidas: cuando llegas al mundo de la maternidad, con tu bebé, estás totalmente en manos de tu doctor y haces lo que te indica.

Para estar en contacto con Normalizando la Lactancia Materna, visita IG: @normalizandolalactanciamaterna

 

 

Restauradoras con Glitter | Ciudad de México
Ayahuitl Estrada

Activismo y feminismos. Restauradoras con glitter

Foto: Brian Nolasco para Restauradoras con Glitter. Cortesía.

—Cuéntanos sobre Restauradoras con Glitter

Restauradoras con Glitter es una colectiva que se formó posterior a la marcha del 16 de agosto de 2019, en donde mujeres de la Ciudad de México exigieron el cese a la violencia machista por parte de elementos policiacos, con el grito «No me cuidan, me violan», debido al caso de una mujer de 17 años que denuncio haber sido violada por cuatro elementos en la delegación Azcapotzalco.

En esta manifestación, el pedestal del llamado Ángel de la Independencia —que en realidad es una victoria alada—, al igual que otros espacios públicos, fuero tomados e intervenidos. Al día siguiente de la marcha los titulares de los medios de comunicación realizaron un linchamiento mediático a las mujeres por su «actuar violento» contra los monumentos, pero no trataron el tema central que es la violencia de género. En redes sociales vimos que muchas de nosotras (mujeres dedicadas al patrimonio) teníamos una opinión en común: «Ningún monumento es más importante que la vida de las mujeres», por lo que decidimos emitir una opinión desde nuestras especialidades, terminamos con un postulado emitido el día 21 de agosto, donde explicábamos por qué dicha intervención es importante, por qué no deben ser silenciadas las voces de las mujeres que exigen justicia y que los monumentos pueden ser restaurados, pero las mujeres violentadas nunca volverán a ser las mismas.

La colectiva está conformada por cerca de 700 mujeres, todas dedicadas a las distintas formas del patrimonio, nos nombramos Restauradoras con Glitter porque, en un principio, éramos solo restauradoras que querían hacer publica una carta; sin embargo, vimos la necesidad de darle voz a nuestras compañeras que también son expertas en otras formas de acercamiento a al patrimonio cultural. En la colectiva hay restauradoras, arqueólogas, arquitectas, antropólogas (físicas y sociales), historiadoras, etcétera. A la fecha se siguen uniendo mujeres de distintos lugares.

—¿Cuáles son sus objetivos?

Nuestros primeros objetivos eran sumarnos a las voces que exigen un alto a la violencia machista contra nosotras las mujeres, emitir una opinión profesional y experta, además de documentar y registrar las distintas intervenciones en la victoria alada (y en otros monumentos), exigir un periodismo profesional que se centre en el problema de fondo y no en las notas tendenciosas que acrecentaron el repudio contra el movimiento feminista. También exigir a los funcionarios públicos que atiendan los temas con perspectiva de género.

—¿Cuáles son sus planes a mediano plazo?

Estamos trabajando el registro de las intervenciones a la victoria alada, que es mucho material de diverso tipo, tenemos fotografías, fotogrametrías, escaneos en 3D, vuelos con dron, etcétera. Tenemos que unificar la información para tener un registro ordenado, como el de cualquier bien cultural que nosotras llegamos a intervenir. Además estamos acompañando a otras colectivas y grupos, y nos estamos formando también en temas de equidad.

Queremos realizar el lanzamiento de un archivo con la información obtenida. El archivo será de uso libre y público; y estará disponible de forma digital. El registro debe ser de todas, porque al final fuimos todas. Entonces es ser una misma voz de algo que exige que haya seguridad para nosotras. Estamos además trabajando de forma académica, escribiendo algunos artículos desde nuestras diferentes ramas antropológicas.

—¿Qué papel consideran que desempeña Restauradoras con Glitter en la lucha feminista?

La lucha feminista es esencial porque si bien tenemos diversos derechos, también sufrimos distintos tipos de violencia, muchos de ellos incluso están normalizados e invisiblizados. Muchas de nosotras somos madres, trabajamos, vemos por sus hijos, muchas criamos solas, y sufrimos violencia económica, social, psicológica, etcétera. Todas salimos a espacios públicos y se nos sigue acosando, muchas somos sobrevivientes de violencia sexual (que pudo haber sucedido desde nuestras infancias), entonces aún en estos momentos de cambios seguimos sufriendo diversos tipos de violencia machista que es ejercida por diversos actores. Queremos una vida digna, libre de violencia para nosotras, pero también para nuestras hijas, hermanas, amigas, madres, vecinas…

Seguiremos con la misma línea de trabajo, que es la de el trabajo de los distintos tipos de herencia cultural con perspectiva de género. Vamos a seguir levantando la voz cada que la sociedad y los medios reclamen sobre los actos vandálicos de las mujeres a los monumentos, pero guarden silencio cómplice con los feminicidios, violaciones y torturas de las que somos víctimas o cuando sean los hombres quienes realicen estos actos vandálicos y no se les cuestione: recordemos el caso del águila decapitada del hemiciclo a Juárez hace poco mas de un mes, donde fue un hombre el que daño deliberadamente este monumento.

Para estar en contacto con Restauradoras con glitter, visita TW: @RGlittermx e IG: @restauradoras.glittermx

 

 

 

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