La arquitectura con un enfoque social es un campo que, en los últimos años, ha tomado gran relevancia en las discusiones en torno al propósito mismo de la arquitectura. Los proyectos de las «medias casas» del chileno Alejandro Aravena, que lo hizo acreedor al Pritzker en 2016, o el reciente interés de Norman Foster por construir viviendas a un precio accesible, después de 40 años de no realizar un proyecto similar, son solo algunos casos que nos permiten comprender de qué forma se está abordando esta línea de trabajo a nivel mundial.

En lo que respecta a México, la arquitectura social no solo tiene una amplia tradición, como lo ha estudiado el arquitecto y crítico Lorenzo Rocha¹, sino también un lugar imprescindible al momento de preguntarse cómo puede mejorarse la calidad de vida de un amplio espectro de la población sin que las dimensiones del espacio o el presupuesto resulten ser un inconveniente. En este sentido, también son relevantes los proyectos destinados al espacio público, donde la comunidad puede reafirmar su identidad colectiva.

A continuación, presentamos cinco proyectos de arquitectura recientes que han tratado de resolver problemas de vivienda de sus respectivos contextos y construir un sentido de comunidad.

—Jojutla, de Dellekamp + Schleich en colaboración con Agenda (2018-2019)

El sismo de septiembre de 2017 en México ocasionó incalculables daños en viviendas de más de 150 000 personas y recintos arquitectónicos de municipios como Jojutla, en el estado de Morelos; donde en cuestión de segundos, gran parte de su infraestructura colapsó.

Tras una iniciativa del Infonavit, que involucró a diversos arquitectos, se dio luz verde a un plan maestro de restructuración de los principales edificios de Jojutla. A los arquitectos Derek Dellekamp y Jachen Schleich, en colaboración con la oficina Agenda —de Colombia— se les encomendaron dos proyectos: la reconstrucción de la iglesia de Jojutla y el centro comunitario del Parque Higuerón.

El Santuario Señor de Tula —espacio donde se ubica su nuevo proyecto— albergaba una capilla construida recientemente y ruinas de una iglesia edificada en el siglo XVIII, que resultaron dañadas durante el temblor. Frente a la gravedad de los daños, la decisión del equipo fue reconstruir completamente la nueva iglesia y mantener los restos arqueológicos intactos.

Dellekamp + Schleich, Santuario Señor de Tula, 2019. Cortesía del despacho.

El segundo encargo para el equipo de arquitectos fue el Centro Comunitario El Higuero que, antes de la catástrofe, alojó diversos negocios y espacios de recreación para los habitantes. Por su relevancia en la reactivación de la vida cultural y comunitaria de Jojutla, éste fue un proyecto que requirió una intervención urgente.

Dellekamp + Schleich, Centro Cultural El Higuerón, 2019. Cortesía del despacho.

—Casa Mulato, de Taller Paralelo (2019)

Ubicada en Oculian de Arteaga, Estado de México, Casa Mulato surgió como parte de una invitación para apoyar a cuatro familias afectadas por el sismo de 2017; una de ellas está conformada por Teresa, Marco Antonio Mulato y sus tres niños.

A partir de una entrevista con la familia, Taller Paralelo estableció los puntos para desarrollar el proyecto arquitectónico, de acuerdo con los recursos destinados para el proyecto por cuatro organizaciones.

La construcción se realizó en un espacio de 42 m2, que cuenta con una recámara individual para cada uno de los hijos y una recámara principal, además de un baño común, una cocina y un comedor.

Todos los espacios de esta iniciativa se diseñaron a partir de la orientación, las vistas y la ventilación natural de los espacios.

Taller Paralelo, Casa Mulato, 2019. Fotografía de Zaickz Studio. Cortesía del despacho.

—Vivienda Social en Pinotepa Nacional, de Héctor Delmar Arquitectura (HDA) y M+N Arquitectura (2019)

El conjunto de vivienda social de Pinotepa Nacional a cargo de la firma HDA y M+ N Arquitectura fue diseñada tomando en cuenta el deseo de los habitantes de la zona. Los arquitectos se reunieron con los pobladores para que comentaran cuál era su vivienda ideal con el propósito de definir los requerimientos, necesidades y estética del proyecto, que está ubicado en un pueblo dedicado a la agricultura con un clima y topografía muy particular.

Las viviendas que conforman el complejo se componen de dos bloques con cubiertas a dos aguas, cada uno pensado para dividir las áreas de convivencia, como el comedor, y las áreas individuales como las recámaras o baños. El vacío entre las dos construcciones constituye un espacio de transición al aire libre, que puede utilizarse para cocinar y también cuenta con un área destinada para la siembra a modo de huerto o la crianza de animales de granja.

HDA+ M+N Arquitectura, Vivienda Social en Pinotepa Nacional, 2019. Fotografía de Jaime Navarro. Cortesía del despacho.

—Unidad de Vivienda Social Las Américas, de SO-IL (2019)

SO-IL es una firma reconocida mundialmente por la versatilidad de su dinámica de trabajo. Desde pabellones para ferias de arte, pasando por museos hasta proyectos de vivienda, la firma tiene como principal objetivo convertir cualquier espacio que se propongan construir en un lugar de socialización e intercambio cultural.

Recientemente SO-IL compartió detalles del proyecto que están preparando para el Instituto Municipal de Vivienda de León (IMUVI) de Guanajuato. Se trata de la unidad de vivienda social Las Américas, compuesta por un bloque de 56 departamentos dispuestos en seis pisos, iniciativa con la que se pretende densificar la zona urbana de León a fin de reducir el tiempo de translado hacia los lugares de trabajo o estudio.

El diseño de Las Américas cuenta con dos patios ajardinados dentro de su bloque, además de que prescinde de vallas de metal: en su lugar, incorpora vegetación para dividir el espacio.

Por la forma alargada de la construcción, el diseño de Las Américas cuenta con una ventilación cruzada natural, lo que elimina la necesidad de un sistema de regulación de temperatura mecánico.

SO-IL, Unidad de Vivienda Social Las Américas, 2019. Tomada de ArchDaily.

—Laboratorio de Investigación y Experimentación Práctica de Vivienda Infonavit (2018)

Nacido como una iniciativa para generar nuevas dinámicas de diseño y construcción de viviendas a un costo accesible, el Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (Infonavit) convocó a más de 30 arquitectos de prestigio, quienes realizaron proyectos en un lugar ubicado en Apan, Hidalgo, donde experimentaron con procesos de construcción innovadores y tecnologías amigables con el medio ambiente.

El resultado es un conjunto de casas prototipo que permiten analizar posibles estatregias para el desarrollo de viviendas de interés social, frente a la estandarización en el diseño que se ha replicado en distintas partes de México en las últimas décadas con el propósito de abaratar costos, pero comprometiendo la calidad de vida.

Algunos de los arquitectos participantes en este proyecto fueron Frida Escobedo, Mauricio Rocha + Gabriela Carrillo y Ambrosi | Etchegaray.

Proyecto de Frida Escobedo en el Laboratorio de Investigación y Experimentación Práctica de Vivienda Infonavit con mobiliario de Héctor Esrawe, 2018. Tomada de la web de Héctor Esrawe.

1«[…] en 1974, se fundó la Universidad Autónoma Metropolitana, que continúa a la vanguardia de la corriente de arquitectura social en nuestro país, la cual dicho sea de paso, en México no es una moda como en el resto del mundo, sino una tradición con profundas raíces en nuestra historia». Lorenzo Rocha, Pensamiento crítico: la clave para la enseñanza de la arquitectura, 11 de julio de 2019, consultado el 25 de julio de 2019. Disponible en línea.